Se acerca la tradicional temporada alta de transporte marítimo. Sin embargo, la congestión en los puertos estadounidenses aún no se ha aliviado. El puerto de Oakland ha superado a Los Ángeles y Long Beach, que se convirtieron en el epicentro de la congestión. El gigante naviero Maersk afirmó el miércoles que Los Ángeles y Long Beach siguen bajo presión debido al tiempo promedio de espera de una a dos semanas. Añadió: «La situación en el puerto de Oakland es aún más grave, y el tiempo de espera se ha ampliado a tres semanas».
Las importaciones estadounidenses procedentes de Asia han alcanzado o se han acercado a un nivel récord durante 10 meses consecutivos, lo que ha impulsado el alza de los fletes. Otro factor es la suspensión estructural. El vuelo se canceló debido a un retraso de una semana o más en los puertos estadounidenses y asiáticos, lo que provocó la pérdida de la rotación prevista. Los retrasos en los puertos de la costa oeste de Estados Unidos han tenido un grave impacto en los acuerdos con los buques de línea.
Según datos de Sea Intelligence Maritime Analysis, un total de 121 vuelos a la Costa Oeste y 21 vuelos a la Costa Este han sido cancelados desde el 1 de enero.
Según el índice de fletes de Drewry, agencia de análisis marítimo, el flete spot para un contenedor de 40 pies de Shanghái a Los Ángeles se situó en 5.600 USD esta primavera. Entre 5.700 USD, se disparó a 6.000 USD/FEU a mediados de abril y alcanzó los 6.358 USD/FEU este miércoles.
Según el analista del sector Lars Jensen, director ejecutivo y socio de Vespucci Maritime, las tarifas de flete en la ruta transpacífica este volverán a subir a partir de junio. Si los puertos norteamericanos y asiáticos logran solucionar la causa principal del aumento de las tarifas de flete, la congestión portuaria, estas se estabilizarán en el tercer trimestre.
Jensen afirmó que, debido a la lenta salida de los barcos de los puertos asiáticos y a los retrasos en su llegada a puertos estadounidenses, la capacidad de los barcos y contenedores se ve artificialmente limitada, y los propietarios de la carga compiten entre sí por espacio y contenedores. "Debido a la capacidad insuficiente, la competencia entre los propietarios de la carga ha obligado a subir los precios". También coincidió: "A partir del 1 de junio, volveremos a ver aumentos de precios".